Coches terroríficos… los tuneados más extravagantes

El tunning en los coches no es una moda reciente, su origen es impreciso, algunos dicen que fué en Europa durante los años 60 y 70, concretamente en Alemania, cuando los propietarios de coches deseaban diferenciarse y dar a sus vehículos un poco de personalidad, buscando imitar los coches de competencia ya fuese en cuanto a su estética o su funcionalidad. Otros afirman que que la tendencia de modificar los automóviles como los ‘lowrider’ se popularizó en Estados Unidos durante los años 50.

Hoy día, el tuneo como se le dice en España, se ha extendido a todo tipo de coches, no sólo los GTI, las lujosas berlinas deportivas y los coches todo–terrero sino que incluso se extiende a coches mono–volumen y pequeños vehículos utilitarios, convirtiéndose en una moda que se extiende rápidamente. Al punto que desde los años 90 algunas marcas reconocidas como BMW, Mercedes o Audi empezaron a desarrollar departamentos especializados en fabricar versiones de sus modelos principales así como accesorios y complementos para personalizar los coches.

Los seres humanos siempre queremos diferenciarnos del los demás, y en efecto de diferentes maneras buscamos que nuestros coche sea un reflejo de nosotros. Por esto es que el tuneo ha movilizado a miles de seguidores en todo el mundo, quienes participan en muestras multitudinarias para presumir y exhibir sus coches tuneados para decidir cuál es el ganador como en la feria SEMA en Las Vegas.

Lo que principalmente buscan quienes están interesados en tunear sus coches es realzar la estética del coche para otorgarle un aire más deportivo, con elementos extra como spoilers delanteros o traseros de mayor tamaño, alerones traseros adicionales, tapones para el depósito del combustible, aumento del tamaño de los neumáticos y nuestro preferido, las llantas de aleación con un diseño llamativos. 

Se puede tunear el coche de diferentes maneras, desde las modificaciones en el interior del coche, como la tapicería, los volantes, pedales y otras piezas. Otra opción muy popular al tunear es cambiar los equipos de sonido para hacerlos más potentes. Otro nivel conlleva hacer mejoras en las prestaciones del coche, como la suspensión y en los frenos incluyendo muelles de mayor dureza y menor altura, amortiguadores especiales o incluso barras más gruesas que aporten una mejor estabilidad. El cambio en los neumáticos es una de las claves de un coche tuneado ya que aportan grandes efectos sobre el comportamiento de un automóvil, cambiando su tamaño y ajuste.

Este hobbie no es igual en todos los países, en Estados Unidos por ejemplo, la mayoría de las modificaciones buscan afectar el rendimiento del motor, con el objetivo de conseguir coches altamente potentes y capaces de alcanzar cifras similares a las de los mejores deportivos del mundo. Mientras que en casi toda Europa, por el contrario, debido a las leyes de limitación y homologación, es muy difícil llevar a cabo este tipo de modificaciones, siendo más habitual ver coches con múltiples modificaciones estéticas que conservan su motor y prestaciones de serie.