Estas penando en comprar un coche, pero no te alcanza para un auto nuevo, así que estás considerando comprar un coche de segunda y no sabes por donde arrancar. Bueno si ya te estás enfrentando ante esta situación, o si por alguna razón lo piensas hacer muy pronto, siempre tendrás dos opciones: puedes acudir a un concesionario automotriz especializado donde vas a recibir la asesoría y garantías necesarias para adquirir un coche de segunda en optimas condiciones, o en caso que lo desees puedes hacerlo directamente tú mismo contactando con su dueño actual.
Cuando acudes a una tienda o salón de ocasión, ellos te ayudarán a resolver todo tipo de dudas que tengas para tomar la mejor elección, en esto consiste la atención y asesoría especializada, un servicio por el cual estarías pagando, ya que muchos de ellos reciben una ganancia o comisión sobre las ventas de los coches. Por lo general estas tiendas o salones de ocasión especializados te ofrecen una garantía, y en caso que después de haber realizado la compra surja algún fallo técnico con el coche, ellos mismos se encargarán de solucionarlo.
Si decides hacer la compra directamente contactando con su dueño, en principio él podrá ofrecerte información mucho más específica acerca del coche, su historial y sus ventajas. Pero ten presente que por lo general los defectos y fallos mecánicos del coche, suelen esconderse bajo una bonita apariencia estética. Será necesario que seas más cuidadoso a la hora de revisar cada detalle y veas un poco más allá de lo superficial.
Cualquiera que sea el caso, te recomendamos que tengas en cuenta estos consejos:
Más allá de la apariencia
Inicialmente pregunta acerca de los informes técnicos del vehículo, pide hacer un recorrido de reconocimiento con el coche para verificar su funcionamiento, durante este presta una especial atención a los ruidos extraños en el motor, a los cambios de marcha, a la dirección y al hundimiento de los pedales.
Nada de gases
Comprueba si el tubo de escape expulsa una cantidad excesiva de humos, este es un indicador perfecto de la situación del motor del coche. Si en efecto arroja gran cantidad de gases, es probable que se deba a un fallo en la mezcla de combustible, aunque también podría ser debido a fallos mecánicos internos del coche.
Mira los neumáticos
Comprueba si hay grietas en los neumáticos del coche, o tienen un desgaste excesivo o irregular, una presión incorrecta, o si los exteriores se han deformado, esto significa que deberás cambiar las gomas. Además, es conveniente que examines la profundidad del dibujo, la presión y la fecha de fabricación de los cuatro neumáticos.
El kilometraje cuenta
Te recomendamos que te fijes en el libro de mantenimiento y en la documentación de la ITV —Inspección Técnica de Vehículos—, donde se lleva el registro de los kilómetros que tiene el coche cuando lo llevan a cada revisión, para verificar el que el kilometraje no haya sido manipulado y que «no te metan gato por liebre».
¡Ojo con los frenos!
Simplemente con el recorrido de prueba manejando el coche, te bastará para comprobar la eficiencia en la frenada, así como el estado de discos y las pastillas de los frenos, presta una especial atención a cualquier incidente que pueda presentarse y sobre todo recuerda que la seguridad es tu prioridad.
Y la suspensión…
Al hacer la prueba de manejo del coche observa si se presenta algún balanceo excesivo al subir pasos elevados, si se escuchan ruidos metálicos anormales o si la carrocería está desnivelada, esto podría deberse a los neumáticos, pero sí ya los has revisado es mejor que le des una buena revisión al sistema de suspensión.
Cristales y espejos
Comprueba el adecuado funcionamiento de todas las ventanillas, de las lunetas y de los limpiaparabrisas del coche, que no estén rotos o manchados. Verifica también que el estado de los espejos panorámicos y retrovisores sea óptimo, par tener una adecuada visibilidad en todo el coche.
¿Cómo esta el interior?
Confirma que los cinturones de seguridad se ajustan al cuerpo, que no estén rotos o desgastados, que respondan a tirones y que los anclajes funcionan perfectamente. Mira el estado y funcionamiento de todos los botones y controles internos, como las palancas y consola central, el aire acondicionado, las puertas y el centro de entretenimiento.
Tapicería y paneles
Deberás revisar la tapicería de los asientos tanto del conductor como del copiloto y pasajeros del coche, muchas veces estas se encuentran desgastadas y deterioradas, verifica si hay quemaduras, manchas o rajaduras. No olvides ver el estado en general de los tableros y otras superficies dentro del coche como los paneles de las puertas y el techo.
¿Están los trámites al día?
Finalmente verifica que el coche esté al día con pagos por revisiones, impuestos de circulación, la ITV —Inspección Técnica de Vehículos— y posibles multas que te puedan ocasionar futuros dolores de cabeza. También necesitarás la solicitud de transmisión de vehículos de la oficina de Tráfico, y comprobante de pago del Impuesto de Transmisiones.
¡Ah!… y por supuesto, ¡no olvides asegurarte que haya suficiente gasolina en el tanque!
Si el estado del interior y la tapicería del coche no es óptimo, es posible que puedas solicitar un precio más bajo y emplear el presupuesto restante para contratar la restauración del interior de tu coche. En Leathertech World somos especialistas en la restauración de tapicerías en cuero, vinilo y plásticos de coches clásicos y de segunda mano, ya que logramos devolverle al interior del coche una segunda vida. Con nuestros servicios de restauración artesanal nos aseguraremos de que el interior de tu coche vuelva a lucir como nuevo.
